De todos es sabido que la técnica al Pastel, se presta especialmente para la elaboración de retratos. Goza de tanto predicamento, que muchos especialistas viven de este trabajo.
En esta entrada vamos a abordar el proceso que yo suelo seguir, y diré algunos consejillos, desgranando el mismo.
Vamos a dibujar a Paola. Cuando tengo que hacer un retrato suelo realizar una docena de fotos, de entre todas selecciono tres o cuatro: una de ellas para la pose, otras para la expresión, y alguna más para la caracterización. Cualquier iniciado en retrato sabe que ninguno de estos puntos puede obviarse.
Realizo el dibujo en base a la pose; lógicamente procuro que la procedencia de la luz sea direccional, la luz frontal del flash no captura los rasgos correctamente.
El papel usado un Canson Mi-teintes de 50x65 color gris verdoso claro. Empleo el lápiz sanguina.
Aunque introducir "añadidos" es un tanto arriesgado, en este caso he decidido colocarle un moño de cabeza.
Recordaré que a la hora de ajustar y ubicar los elementos faciales es fundamental conocer las diferencias propias entre la anatomía de un niño y un adulto.
Realizado el encajado a sanguina, descargo algunas líneas a sepia, a continuación ubico las principales zonas de luz con pastel blando, y seguidamente el color carne local en las zonas intermedias. Después, y con el pastel blando de canto aplico descargas violentas en el pantalón, siguiendo la lógica de las arrugas y dejando sin tocar las zonas de realce, es hora de retirarse un par de metros, obsevar vacíos, y modificar y caracterizar lo que haga falta; para eso lo mejor es pensar que lo realizado hasta ahora ha sido obra de otra persona, y que hay que corregirle lo hecho por el.
El siguiente paso dependería del enfoque que queramos darle a la obra, si quisiéramos "enriquecerla" con matices variados, o finalizarla a base de un modelado suave y uniforme. Sea una opción u otra ha llegado el momento de fijar el pastel.
Como apreciamos a la izquierda, he colocado dos referencias: la pose, y la caracterización, se trata pues de hacer lo que yo denomino un "refrito". Esto no es aconsejable planteárselo al principiante.
Sigo reforzando blancos, ajusto los dientecillos superiores, el ojo de la izquierda y mejoro la moña, a continuación fijaríamos con los dedos suavemente, al mismo tiempo fundiríamos unos colores con los adyacentes.
La primera fase acaba, continuaremos el próximo dia, sabido es que yo trabajo a "trompicones".