Este David lo pinté hace casi dos décadas. Mide 1,20 m. de alto y creo que sobre el metro de ancho, está ejecutado en óleo sobre lienzo, preparado con texturas de gesso. Lo presenté en su momento al Certamen de Utrera, donde me tienen los puntos puestos para no seleccionarme por siempre-jamás. ¡¡¡¡ En dicha ocasión me lo devolvieron roto, con un "siete" de 10 centímetros. (no comment).
Ahora voy a desprenderme de el, pasará a mejores manos, así que lo subo al blog, y algo de constancia me quedará del mismo.
Lo titulé La metamorfosis del David, tras la rotura le añadí un zócalo de arpillera cosido con tramilla, quedó tan bien reparado que parecía hecho ex-profeso. Después lo convertí en posmoderno con la inclusión del barquito de papel: (una segunda sacada de contexto). Ahora sale de la catacumba, osea el sótano de mi casa, a que le de el aire.
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